Con esta decisión, los dirigente abren la puerta del club a
los "muchos" postulantes para ese cargo, que afirmaban no poder
hacerlo por la presencia del Miadosqui. En este sentido, el ex presidente
afirmó que presentaba su dimisión para "que vengan, no sean cagones, que
no hablen más y se acerquen".
En una nota periodística a Radio Sports, tras la derrota de
San Martín ante Defensa y Justicia, el pasado jueves, el ex presidente
consideraba que sólo Pablo Eslabusqui y Roberto Petrignani tenían condiciones
para asumir la máxima responsabilidad. Y que San Martín se encontraba en un
momento "visagra" ya que si no se da el ascenso en los próximos seis meses,
su situación se complicaría.
"Los próximos seis meses serán determinantes para el
futuro del club, porque sino ascendemos, la vamos a pasar muy mal. No se que
campeonato de ascenso importante quedará, cuando se de la reestructuración. Si
no ascendemos y no logramos estar entre los 10 mejores equipos, nos complicamos
todos, "ascenso o muerte" dijo el ex mandatario
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