Pero, fue toda una demostración de estrategia y claridad. Si bien se sabía previamente que no era un rival para sorprender, la virtud estuvo en que el equipo nacional hizo todo sencillo y no se complicó para nada. Fue directo a buscar el arco rival y los jugadores respondieron con acierto, inclusive los que fueron ingresando sabían claramente que hacer en la pista.
En síntesis, buenos movimientos y definición fue la característica del debut argentino en el campeonato mundial. Mañana ante Inglaterra, la selección de Dario Giuliani buscará repetir el juego y asegurar, con goles, la clasificación.
Imagen Sergio Alfonsin (Radio Blu)
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